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miércoles, 31 de octubre de 2012

Estudio sobre el materialismo, la infelicidad y la television


Hola amigos,

me gustaría compartir con vosotros un artículo publicado en la prestigiosa publicación digital americana Pediatrics, revista oficial de la Academia Americana de Pediatría y que he leido recientemente.

Tengo que decir que más que un artículo es un estudio realizado por Suzanna J. Opree, Moniek Buijzen y Patti M. Valkenburg, profesoras del Instituto de Investigación en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales y del Comportamiento de la Universidad de Amsterdan, sobre la influencia del materialismo sobre la felicidad de los niños.



Objetivo:
Investigaciones en el ámbito adulto sugieren la relación negativa entre el materialismo y la satisfacción en la vida. Investigaciones realizadas en niños han indicado también que el materialismo hace a nuestros hijos más infelices, pero sin tener clara la razón. Mediante este estudio pretenden aportar la relación directa entre materalismo y satisfacción en la vida.

También han investigado si esa relación depende del nivel de exposición de los niños a la publicidad.

Métodos:
Tomando una "muestra" de 466 niños, comprendidos entre los 8 y 11 años de edad, con un 55% de los mismos niñas, les han hecho participar en dos diferentes encuestas online, con un año de diferencia entre ambas.


En las dos encuestas los niños fueron consultados sobre lo felices que eran en casa, en la escuela, en sus relaciones personales y con ellos mismos.

También calificaron la importancia de las posesiones materiales en su vida y el grado en el que pensaban que esas cosas podrían aportarles felicidad o hacerles ganar amigos.

Conclusión:
La conclusión fue que no se ha encontrado evidencia de que los niños materialistas lleguen a ser menos felices.

Sin embargo, los chicos que eran relativamente infelices en la primera encuesta, tendían a volverse más materialistas durante el siguiente año, aunque sólo si veían frecuentemente programas de televisión populares entre los pre-adolescentes.

Según Opree, "los anuncios de televisión serían solamente uno de los factores que podrían afectar al nivel de materialismo de los niños. Al igual que a la infelicidad."

"El entorno, familia y compañeros, juega un importante papel. Los valores mostrados por familiares y compañeros son más probables de ser adoptados por el niño".

No se ha realizado ningún estudio que muestre si los valores de los padres ganan a los anuncios de televisión en lo que al materialismo se refiere. Sin embargo, Opree dice "lo que sabemos es que los padres pueden neutralizar la influencia de la publicidad".

"Los padres pueden ayudar enseñando a sus hijos a ver anuncios con un ojo crítico y a ser escépticos a imágenes que muestren que un producto puede hacer la vida mejor". También es necesario mostrar a los hijos otras fuentes de felicidad como el amor, la amistad y jugar".

¿y por qué deberíamos preocuparnos los padres acerca de mantener a sus hijos lejos del camino hacia el materialismo?

Es  cierto que en este estudio los niños materialistas no parecen dirigirse a la infelicidad, pero eso es sólo en una visión a corto plazo.

Estudios previos realizados en adultos sugieren que es muy probable que los niños materialistas acaben siendo dirigidos a una vida insatisfecha.

Algunos expertos ya recomiendan que los padres limiten el tiempo que los niños estén expuestos a la televisión, lo cual les ayudará a mantenerse a salvo de la publicidad en general.

La Academia Americana de Pediatría sugiera que los niños no deberían dedicar más de dos horas al día a visionado "no-educacional" de la televisión y ordenadores. También se sugiere no tener televisiones ni ordenadores en los dormitorios.

Creo que las conclusiones deberían al menos hacernos pensar sobre el control que tenemos en la transmisión de valores a nuestros hijos y sobre la información que reciben en su etapa de crecimiento.

Como padres tenemos mucho que aportar en su formación como personas, y no deberíamos dejar que influencias externas con intereses particulares hiciesen esa labor.

Ahora ya es cosa de cada uno el camino que quiera seguir

Un abrazo

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